La Pastora Romina estuvo a cargo de llevar la palabra a la Iglesia, teniendo como objetivo enseñarles sobre algo tan importante ¿quién es una madre?

El amor de una madre, está hecho a base de dolor e ingratitudes, porque una madre es algo que un niño ama pero un hombre olvida. Aunque todos podemos tener un concepto distinto de lo que es una madre, la verdadera definición la encontramos en la Biblia.

La pastora Romina, el día de hoy nos habló sobre una madre que no pertenecía al pueblo de Dios, sino que era una Cananea, que impresionó a Jesús por el amor hacia su hija y por su fe inquebrantable. En Mateo 15:21-28, la palabra nos revela quien es una madre:

“21 Saliendo Jesús de allí, se fue a la región de Tiro y de Sidón. 22 Y he aquí una mujer cananea que había salido de aquella región clamaba, diciéndole: ¡Señor, Hijo de David, ten misericordia de mí! Mi hija es gravemente atormentada por un demonio. 23 Pero Jesús no le respondió palabra. Entonces acercándose sus discípulos, le rogaron, diciendo: Despídela, pues da voces tras nosotros. 24 Él respondiendo, dijo: No soy enviado sino a las ovejas perdidas de la casa de Israel. 25 Entonces ella vino y se postró ante él, diciendo: ¡Señor, socórreme! 26 Respondiendo él, dijo: No está bien tomar el pan de los hijos, y echarlo a los perrillos. 27 Y ella dijo: Sí, Señor; pero aun los perrillos comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos. 28 Entonces respondiendo Jesús, dijo: Oh mujer, grande es tu fe; hágase contigo como quieres. Y su hija fue sanada desde aquella hora.“

  1. Es alguien que está dispuesta a todo por la vida de sus hijos.
  2. Siente el dolor de sus hijos como su propio dolor.
  3. La madre nunca se rinde por sus hijos.
  4. Una madre posee una fe inquebrantable.

En una parte de este relato, Jesús le responde de una manera que ella no esperaba, sin embargo; eso no la detuvo y su fe no se quebrantó. Más bien, esa respuesta elevó su fe para que Jesús hiciera el milagro que ella quería para su hija.

Iglesia, madres, puede ser que en estos momentos no tengas las respuestas que esperas para tus hijos de parte del Señor, pero hoy te invitamos a que no dejes de orar, no dejes de creer, porque es tu fe inquebrantable la que te lleve a recibir el milagro que hoy pides para tus hijos.