Hoy en casa, mi esposa estuvo ministrando a propósito del día del padre, sobre la restauración de la paternidad, ella enseñaba que el diablo odia la paternidad para que los hijos de Dios no reciban su herencia, y a través de espíritus, entre ellos Jezabel, destruyen la hombría, su sacerdocio, dignidad, su propósito y su destino, y hace hombres débiles y temerosos.

Dice el Libro de Malaquías 4:6, que: “Él hará volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres, no sea que yo venga y hiera la tierra con maldición”.

 

Las maldiciones de la sociedad es el resultado de la falta de paternidad (Caos, depresión, rebelión), porque La paternidad es una necesidad, todo el Reino el cielo está establecido en la paternidad, Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo. Recordemos que la asignación principal de Jesús fue redimir pecados y dar acceso a la paternidad de su Padre celestial, no olvidemos lo que dice la Palabra, Jesús es el camino para llegar al Padre…

Hay tres niveles de paternidad:

  • Padre celestial
  • Padre natural
  • Padre espiritual, quien está como cabeza de la iglesia

 

Donde no hay paternidad, no hay herencia. Se requiere un padre que no vea tu pasado, ni tu presente, sino tu futuro. Dios no te condena, tu padre natural te ama y tu padre espiritual hace lo mismo, solo anhelan el bien y la bendición para sus hijos.

La paternidad te da identidad, tú estás en esta casa porque Dios Padre te colocó aquí, y te dio un padre espiritual, que creyó en ti cuando nadie lo hacía, si te caes te dice levántate, te imparte para que sigas adelante, te enseña a tener temor de Dios.

¿Quieres ser un árbol plantado que da buenos frutos? Recibe la paternidad de tu Padre Celestial, de tu padre natural y de un padre espiritual. ¡Vivirás en bendición!